Las autoridades estadounidenses, encabezadas por el fiscal Philip R. Sellinger, lograron con éxito la confiscación de 54 millones de dólares en Ethereum (ETH) pertenecientes a Christopher Castelluzzo, un narcotraficante condenado con operaciones en Lake Hopatcong, Nueva Jersey.
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El Compromiso de las Autoridades con la Confiscación de Ganancias Criminales
La Oficina del Fiscal de los Estados Unidos presentó una acción de decomiso civil con el propósito de recuperar criptomonedas que se determinó que eran el resultado de actividades ilegales relacionadas con la distribución de narcóticos en Nueva Jersey y sus alrededores. El fiscal federal Philip R. Sellinger enfatizó el compromiso de las autoridades de confiscar las ganancias financieras derivadas de actividades criminales, ya sea en forma de efectivo o criptomonedas.
Las autoridades estadounidenses están comprometidas a perseguir activamente a quienes intentan aprovecharse de actividades ilegales y buscan evadir las consecuencias legales al utilizar criptomonedas como medio para ocultar sus ganancias ilícitas.
Uso de Criptomonedas por Delincuentes en la Red Oscura
El Departamento de Justicia de EE. UU. (DOJ) destacó el uso de criptomonedas, como Bitcoin (BTC) y Ethereum (ETH), por parte de delincuentes en la red oscura para evadir la detección de sus actividades ilegales. Esto plantea un desafío adicional para las fuerzas del orden, ya que las criptomonedas ofrecen un grado de anonimato que complica la identificación y el seguimiento de las transacciones ilegales.
Historia de Delitos y Confiscación de Ethereum
Según los documentos judiciales y las investigaciones realizadas, Christopher Castelluzzo y sus asociados participaron en una conspiración para vender narcóticos entre 2010 y 2015. Durante este período, comenzaron a utilizar Bitcoin para llevar a cabo transacciones de drogas en plataformas de la red oscura.
Castelluzzo adquirió 30,000 Ethereum durante una Oferta Inicial de Monedas (ICO) de Ethereum en julio de 2014 y recibió 30,000 Ethereum Classic en 2016. Su plan original era trasladar estos fondos a un paraíso fiscal en Irlanda, Malta o las Bahamas, o mantenerlos en USDT (Tether).
Sin embargo, la intervención de las autoridades condujo a la incautación de 30,000 Ethereum, valorados en 31 millones de dólares en ese momento, a través de un registro en la residencia de Brian Krewson, un socio de Castelluzzo.
A pesar de estar encarcelado y cumpliendo condenas simultáneas de prisión federal y estatal por delitos relacionados con la distribución de drogas, Castelluzzo intentó evadir impuestos y transferir los 30,000 Ethereum fuera de los Estados Unidos.
Los planes de Castelluzzo fueron descubiertos a través de conversaciones telefónicas grabadas en prisión, que expusieron sus intentos de lavar criptomonedas. Como resultado, las autoridades de EE. UU. intervinieron y confiscaron sus tenencias de criptomonedas relacionadas con sus actividades de tráfico de drogas.
Impacto Significativo de la Incautación
El valor actual de los 30,000 Ethereum incautados asciende a aproximadamente 54 millones de dólares, lo que destaca la importancia de la confiscación de activos relacionados con actividades ilegales. La operación no solo representa un importante éxito en la lucha contra el narcotráfico, sino también un golpe a las ganancias ilícitas obtenidas a través de criptomonedas.
Estado Actual de Ethereum
Hasta la fecha de este artículo, Ethereum cotiza a $1,815, lo que representa un aumento del 0.9% en las últimas 24 horas. Además, muestra una tendencia alcista constante de más del 2% en los últimos siete días, lo que refleja el impulso positivo en el mercado de criptomonedas y, en particular, en el valor de Ethereum.
Conclusión
La exitosa confiscación de 54 millones de dólares en Ethereum a un narcotraficante condenado destaca el compromiso de las autoridades estadounidenses en la lucha contra actividades ilegales que involucran criptomonedas. Esto subraya la importancia de aplicar la ley en el ámbito de las criptos y demuestra que los delincuentes no están exentos de las consecuencias legales, incluso cuando utilizan criptomonedas como medio para ocultar sus actividades criminales. La acción es un recordatorio de que las criptomonedas no son un refugio seguro para actividades ilegales y que las autoridades están decididas a garantizar que se apliquen las leyes vigentes.
