El presidente de El Salvador, Nayib Bukele, anunció la adquisición de 8 bitcoins (BTC), reactivando la estrategia de inversión del país tras una breve interrupción y reafirmando su apuesta por las criptomonedas.
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Reanudación de la estrategia
Después de una pausa de siete días, El Salvador ha retomado su política de compra de bitcoin. A través de un mensaje en la red social X (anteriormente Twitter), Bukele informó que el país ha adquirido 8 BTC, lo que equivale a aproximadamente $751.664, según el precio actual del mercado:
Desde noviembre de 2022, el gobierno salvadoreño ha implementado un plan de adquisición diaria de bitcoins, con la intención de fortalecer sus reservas nacionales y consolidarse como un referente en la adopción institucional de criptomonedas.
Con esta reciente compra, el país acumula un total de 6.088 BTC, que representan un valor estimado de más de $572 millones.
Respuestas a las críticas y dudas
Durante la pausa en la compra de BTC, diversos analistas y críticos especularon sobre un posible cambio en la estrategia gubernamental. Sin embargo, Bukele respondió con un mensaje en el que citó un versículo bíblico: “¡Oh, vosotros, hombres de poca fe!”, sugiriendo que su compromiso con la criptomoneda sigue intacto.
Las críticas hacia la política bitcoiner de El Salvador han sido recurrentes desde que el país adoptó la criptomoneda como moneda de curso legal en 2021. Organismos internacionales, como el Fondo Monetario Internacional (FMI), han expresado su preocupación por los riesgos financieros asociados a la volatilidad del bitcoin.
A pesar de lo señalado, Bukele y su administración han mantenido su postura y continúan con la acumulación del activo digital.
Futuro de la adopción de BTC en El Salvador
El Salvador ha sido un pionero en la adopción del BTC a nivel gubernamental, pero la iniciativa ha enfrentado desafíos.
A partir de mayo de 2025, entrarán en vigor reformas a la Ley Bitcoin, que eliminan la posibilidad de pagar impuestos y otros servicios estatales con la criptomoneda. Esta medida podría impactar la usabilidad del bitcoin en la economía salvadoreña y modificar la forma en que los ciudadanos y las empresas interactúan con este activo.
A pesar de las incertidumbres, la reciente reanudación de compras por parte del gobierno salvadoreño refuerza su compromiso con la criptomoneda y su visión a largo plazo de posicionar a El Salvador como un líder en el ecosistema de las finanzas digitales.
