Paul Atkins fue juramentado como nuevo presidente de la SEC, marcando un cambio hacia políticas de mercado más flexibles y con una visión favorable a las criptomonedas.
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Un perfil con trayectoria y postura crítica hacia la sobre-regulación
El veterano regulador Paul Atkins asumió este mes como presidente de la Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos (SEC), tras ser confirmado por el Senado en una votación que reflejó la división política sobre su enfoque.
Atkins, que ya había sido comisionado de la agencia entre 2002 y 2008, regresa ahora como presidente, en un momento clave para los mercados y con la clara intención de replantear la relación entre el regulador y la industria de las criptomonedas.
Durante su juramentación, Atkins destacó la importancia de mantener mercados “justos, ordenados y eficientes”, pero subrayó también la necesidad de evitar una regulación excesiva que frene la innovación tecnológica y financiera.
Su nombramiento fue bien recibido por varios sectores, especialmente por aquellos vinculados al ecosistema cripto, que han venido criticando las acciones de cumplimiento agresivas que marcaron la gestión de su antecesor, Gary Gensler.
Un nuevo rumbo para la industria cripto y la SEC en EE. UU.
El nombramiento de Atkins podría marcar un cambio importante en la forma en que la SEC aborda los activos digitales.
Con una trayectoria conocida por su postura pro-mercado y su visión crítica hacia la sobre-regulación, Atkins ya ha comenzado a revisar casos que involucran a importantes empresas de criptomonedas como Coinbase, Consensys, Gemini y Uniswap, según informaron fuentes cercanas a la agencia.
Además, bajo su gestión, la SEC tiene en revisión más de 70 solicitudes para la creación de fondos cotizados en bolsa (ETF) vinculados a criptomonedas, un proceso que podría facilitar el acceso de inversores institucionales y minoristas a este tipo de activos, consolidando a EE. UU. como un centro financiero clave en esta industria.
Reacciones positivas desde la industria y los mercados
La comunidad cripto celebró la llegada de Atkins. Brad Garlinghouse, CEO de Ripple, afirmó que el nuevo liderazgo puede devolver “el sentido común” a la SEC, mientras que Paul Grewal, director legal de Coinbase, calificó el cambio como “urgente y necesario”.
Por su parte, el mercado respondió con optimismo: Bitcoin superó por primera vez los $100,000, impulsado por las expectativas de un entorno regulatorio más predecible y favorable para la innovación.
La mirada hacia el futuro: una regulación menos restrictiva
Expertos anticipan que la administración Trump podría trasladar parte de las competencias sobre criptomonedas de la SEC a la Comisión de Comercio de Futuros de Productos Básicos (CFTC), una agencia que muchos consideran más dispuesta a colaborar con el sector tecnológico.
Con Atkins al frente, la SEC parece orientada a construir un equilibrio entre la protección del inversor y el estímulo a la innovación, en un momento en el que Estados Unidos busca mantener su liderazgo en la economía digital.
